Victorio Pirillo, el secretario general, pide que el municipio realice hisopados al personal municipal esencial, además del pago de la primera cuota de $5.000 de la asignación estímulo que dispuso el Dec. 315/2020 del gobierno nacional. 

 

Pirillo es uno de los dirigentes sindicales que apoyan la cuarentena pero, a su vez, reclama que el Estado, desde sus jurisdicciones nacional, provincial y municipal, gestione políticas que atiendan la economía del pueblo trabajador en general, de las pymes y de los trabajadores que deben exponerse mientras dure el aislamiento social preventivo y obligatorio por el coronavirus.

 

Esta semana comenzaban en Vicente López reuniones entre el sindicato y la Intendencia de Jorge Macri, para abordar temas sustanciales sobre la calidad de vida de los trabajadores municipales ante la pandemia, y trascendieron algunos de los reclamos, tras el avance de las excepciones en rubros de la economía local, lo cual aumenta la probabilidad de que se produzcan casos de COVID-19.

 

El sindicalista pide que se realicen hisopados a todos los trabajadores municipales en tareas esenciales, no solo a profesionales. Con relación a estos últimos, solicitó que se les aseguren los barbijos quirúrgicos que permiten el filtrado de la mayoría de las partículas que se encuentran en sus ambientes de trabajo, en contacto con casos sospechosos de COVID-19.

 

En otro orden de cosas , Pirillo suele estar atento a la marcha general de la política y la economía nacional y en dicho contexto, el sindicalista, fuera de lo específicamente municipal, también salió a apoyar a los profesionales que aun no han cobrado la primera cuota de la asignación estímulo que dispuso el Dec. 315/2020, del gobierno nacional, por $20.000 en cuatro cuotas de $ 5.000 entre abril y julio.

 

En esta línea también apoya el reclamo docente, sobre todo de escuelas privadas, donde los sueldos se bajaron ad hoc, o no se pagan -según datos de SADOP, el sindicato nacional de docentes privados-, para que también se otorgue una asignación, dado que su trabajo home oficce se ha convertido en fulltime, con padres y alumnos requiriéndolos durante todo el día.

 

"Para que los chicos y los padres no pierdan el hábito de ir y estar en contacto con la escuela aunque no haya clases por el aislamiento social, la comida a las familias vulneradas debería entregarse gradualmente en los propios establecimientos educativos, respetando el distanciamiento social igual que en otras actividades, como forma de prepararse para salir de la cuarentena. La relación con la escuela es relevante para las familias", aseguro Victorio Pirillo.