El sábado 3 de Junio se realizará, como todos los años, una nueva marcha “Ni Una Menos”, una jornada de lucha a nivel nacional convocada por mujeres, personas trans y el colectivo LGTBQ+ con el fin de pedir un freno a la violencia de género y visibilizar los casos de femicidios y transfemicidios en el último tiempo y con cifras sumamente preocupantes.
Lis Diaz es concejal y precandidata a intendente en Tres de Febrero, pero por sobre todas las cosas, una militante intachable frente a estas temáticas. Desde aquella primera marcha del 3 de Junio del 2015 a la actualidad ha participado en todas y siempre tiene conceptos para aportar. “En el último tiempo se pudo poner en agenda un problema urgente como el que vivimos las mujeres y las diversidades, que nos matan. Lamentablemente, muchas veces nuestra vida corre peligro y la violencia machista crece todos los días. La sociedad tomó más conciencia y, pese a que falta mucho, sin esas movilizaciones no se hubiesen dado conquistas como la interrupción voluntaria del embarazo, el hecho de que haya Ministerios con políticas públicas específicas para mujeres y diversidades”, señaló en diálogo con 2Urbanos.
“Todavía tenemos un promedio muy alto de femicidios por día, por lo que, lamentablemente, nos queda mucho trabajo por hacer y por eso seguiremos movilizándonos. Para bajar los números se necesita construir más igualdad y oportunidades para que las mujeres y las diversidades podamos vivir dignamente. La situación económica actual es muy compleja, y eso trae sus dificultades en los hogares”, propone Lis Diaz al ser consultada sobre los 2282 femicidios ocurridos desde el 2015 a la actualidad según el Observatorio de Femicidios “Adriana Marisel Zambrano”, dirigido por la Asociacion Civil La Casa del Encuentro.
De esa investigación de femicidios se desprende que 121 corresponden a adolescentes de entre 13 y 17 años, un dato que fue especificado teniendo en cuenta el caso que marcó el comienzo de las marchas masivas: el femicidio de Chiara Páez, ocurrido el 10 de mayo de 2015 en la ciudad santafesina de Rufino. “La problemática es compleja y requiere de múltiples políticas públicas para que podamos vivir libre y sin miedo, y para eso necesitamos entender que la prioridad tenemos que ser las mujeres y las diversidades y no aplicar políticas de ajuste y de endeudamiento que genere más empobrecimiento, en un sector que ya es el más empobrecido de la sociedad”, sostuvo Lis.
El gobierno nacional y provincial actual han trabajado sobre temáticas de género, pero las cifras siguen aumentando. La dirigente social de Tres de Febrero destaca: “ Pudieron instalar lo que es la ‘Agenda de los Cuidados’, que significa poner en valor todo ese trabajo no remunerado que realizamos las mujeres, que está invisibilizado y que muchas veces nos lleva a una segunda o tercera jornada laboral. Ademas se defendió la moratoria de jubilación para las amas de casa. Esas cosas también les permiten a las mujeres que llegan a la edad de jubilarse poder tener derechos. Lamentablemente todos los avances son pequeños en el medio de una desigualdad tan grande y de un sistema que hay que modificar”.
Desde el ámbito local, el Concejo Deliberante de Tres de Febrero presenta recurrentemente proyectos de ordenanza relacionados al género, pero las principales acciones deberían ser por parte del intendente. “En Tres de Febrero hubo un aumento de femicidios. En los últimos tiempos vimos recrudecida las situaciones de violencia en nuestro distrito y eso, lamentablemente, nos pone en una situación de peligro a todas las vecinas que vivimos y que queremos seguir viviendo acá. Hay políticas públicas, tanto provinciales como nacionales, que en el gobierno de Diego Valenzuela no se aplican. Por ejemplo no hay botones antipánico ni dispositivos duales para los agresores; tampoco hay una guardia de género que atienda las 24 horas a las mujeres”, criticó la candidata a intendente por el espacio IMPULSAR. Y concluyó: “Todo eso sumado a que en la última revisión de cuentas pudimos ver que el presupuesto para el programa de abordaje integral para la prevención de las violencias tuvo una subejecución del 78%, y eso tiene efectos muy negativos porque aumentó la violencia y los femicidios”.