Por: Alan Mineo

El municipio de Hurlingham presenta innumerables dificultades en varias de sus áreas claves. Por ejemplo, la salud es una cuenta pendiente para el gobierno local, que no posee el hospital municipal en óptimas condiciones a nivel edilicio y los médicos que allí trabajan hacen malabares todos los días. Además, los centros de rehabilitación no están funcionando de la mejor manera.

Bajo este incierto panorama, Fernando Favilli presentó un proyecto en el HCD que consiste en la creación de un Centro de Rehabilitacion y Asistencia Integral de las adicciones que disponga un inmueble para atención y asesoramiento de los afectados y familiares. Este deberá brindar los servicios de atención ambulatoria, clínica de dia, internación, terapias grupales y familiares.

“Todos los centros de atención que hay en Hurlingham están funcionando mal porque no les dan una cobertura completa, por ejemplo no tienen psicólogos o psiquiatras. Falta mucha atención médica y estructuras para atender bien al paciente”, comentó el dirigente de la UCEDE en diálogo con 2Urbanos.

El proyecto, presentado a fines de Enero de este año, describe que el centro deberá tener un grupo interdisciplinario para la atención adecuada y de forma profesional, el cual deberá contener médico clínico, psicólogo, psiquiatra, asistencia social, abogado, entre otros. Entre sus principales funciones, además de las mencionadas, estarán: ayuda al adicto para que termine los estudios, realice cursos de profesiones (electricidad, plomería, albañilería, etc.) y encuentre trabajo.

“La municipalidad destinó millones de pesos a un centro de asistencia y este afirma que 200 personas pasaron por ahí, según lo que averigüe, eso no es real. Hurlingham necesita cuanto antes un centro serio y completo de rehabilitación”, opinó Fernando Favilli.

Según lo publicado en el 2021 por Sedronar (Secretaria de políticas integrales sobre drogas de la Nación Argentina), la mortalidad relacionada, de forma directa o indirecta, al consumo de sustancias psicoactivas en el año 2019, en una población de entre 15 a 64 años, fue estimada en 13.182 casos. Esto representa el 16,3% de las muertes totales para este grupo de edad y una tasa bruta de mortalidad de 45,7 cada 100.000 habitantes.