Echevarrieta sostuvo que “mantengo los mismos argumentos de la negativa del año pasado, el presupuesto no se condiciona con las necesidades de los vecinos de San Martin. El ajuste se realiza en las áreas que el vecino mas reclama”.

En sus declaraciones, el concejal también hizo hincapié en el gasto político existente , donde comenta que el ejecutivo envió informó  una planilla municipal la cual no coincide con  la realidad presupuestaria. Señaló específicamente su preocupación por la falta de coherencia en este aspecto. Asimismo, expresó su disconformidad respecto a la inaccesibilidad al sistema RAFAM, y distinguió seguirá reclamando por el mismo.

Otras razones por la cual no acompañó dicho presupuesto incluyen la disminución en el gasto público, con un enfoque particular en obras públicas mas expresamente en desagües, bacheos y el estado de las calles.

Además de la escasa inversión en seguridad cual la del año pasado era del del 5% el porcentaje del presupuesto marcado en esta área para el proximo año es aun menor.

Finalmente, en cuanto a la fiscal impositiva, llamó la atención sobre el marcado aumento de tasas e impuestos que ocasionará un incremento del %160. Además de hacer hincapié en el capítulo 13, referente al estacionamiento medido y los acarreos de grúas pasando de $80 a $190 por hora. Echevarrieta citó un ejemplo del gobierno de la ciudad en 2022, donde se aprobó una ley para eximir a los usuarios del acarreo en situaciones de mal estacionamiento.