

Desde su juventud hasta su incansable labor en cooperativas y espacios populares, Eduardo dejó un legado que, incluso tras 20 años de su partida, sigue siendo una fuente de inspiración en la resistencia contra las políticas liberales y antipatria. Durante el acto, su hermano Pablo Puebla, referente del Frente Nacional Malvinas, compartió emotivas reflexiones sobre la vida y el impacto de Eduardo en su comunidad.
“El homenaje lo hacemos todos los días cuando nos levantamos, a Eduardo y a todos los militantes de nuestra patria que han dejado su vida por los ideales con su militancia. A nosotros no nos dio nadie nada, todo lo logramos luchando”, expresó en diálogo con 2urbanos.
Pablo también destacó el contexto histórico actual y la necesidad de construir esperanza en tiempos adversos: “Estamos en una resistencia, en confrontar, en construir esperanza porque sabemos que esto es el ciclo de nuestra historia. Estamos en un ciclo del antipueblo y nosotros estamos construyendo el ciclo de las victorias de nuestro pueblo”. En este sentido, hizo un llamado a la militancia a seguir luchando y construyendo día a día.
El homenaje también fue una ocasión para reflexionar sobre el rol de Eduardo como líder social y militante comprometido: “Nosotros con Eduardo parimos una organización social porque el Estado se había borrado de nuestros barrios. Él sigue vivo en cada uno de los compañeros que luchan; físicamente está ausente. Hoy estaría, ni más ni menos, que en la Plaza de los Dos Congresos con una actitud muy activa, muy confrontativa, resistiendo a la Ley Bases y a este gobierno en todos los ámbitos que podemos”.
Finalmente, Pablo Puebla reafirmó el legado de su hermano: “Aprendimos con él que el cuadro militante tiene que ser integral. En el barrio construíamos resistencia. Así que no nos queda otra, con él presente en nuestra memoria, resistir y construir una propuesta desde el debate de la militancia que dé respuesta a una Argentina que hoy el pueblo está buscando y que no lo está encontrando en nosotros”.