

Soy Andrea Martins, recorro la carrera docente hace casi 30 años, fui maestra, secretaria, directora y ahora el desafío lo llevo como Consejera Escolar de Tigre. Para esto me formé como licenciada en Gestión Educativa y me mantengo actualizada siempre, porque la realidad educativa va mucho más rápido que la formación académica en sí misma. Estoy casada y soy mamá de dos varones.
Actualmente formo parte de Encuentro Vecinal, un espacio representado por vecinos de diferentes espacios políticos, empresariales, culturales, deportivos y educativos, pero eso que aparenta ser una diferencia es lo que más nos enriquece. La construcción política real siempre es con el otro y en esa diversidad se crece. El sectarismo y la división ya los hemos visto y sabemos a lo que nos llevaron.
El mundo cambia muy rápido y, paradójicamente, el sistema educativo permanece casi intacto. Tenemos estudiantes del siglo XXI con una escuela del siglo XX. Esa actualización del sistema nos urge; esa transición de lo analógico a lo digital tiene que ser ya. Esto se refiere al cambio no solo en la forma en que se enseña y se aprende, sino también en cómo se interactúa con la información, siendo este el mejor camino para lograr una mayor calidad educativa y preparar a los estudiantes para el mundo que viene.
Cabe destacar que cuando hablamos de mejorar la educación, muchos piensan que es solo arreglar las escuelas. Esa es la parte fácil, con un par de ingenieros, arquitectos y recursos se logra. Pero nuestra idea de mejorar la educación va más allá de eso; va en cambiar la relación del estudiante con el aprendizaje, en desarrollar dentro del aula situaciones que hagan que ellos se replanteen la forma en que pensaron hasta hoy.
Una de las propuestas más completas que tenemos es la creación del Primer Polo Educativo Virtual, con oferta de cursos y programas de estudio en línea y presenciales para facilitar el acceso a la educación y promover la flexibilidad en el aprendizaje. Las plataformas de aprendizaje en línea ofrecen cursos y programas de estudio de universidades e instituciones de todo el mundo. También permitirían incluir la realidad virtual en el aula, lo que lleva a los estudiantes a interactuar con objetos y entornos virtuales para crear experiencias de aprendizaje. Esto pone de manifiesto que es posible tener una educación para el futuro que viene con los recursos que ya tenemos, con un trabajo articulado entre organismos y organizaciones, sin aumentar el gasto a los vecinos.
Otra propuesta innovadora es el uso de la inteligencia artificial para automatizar tareas administrativas como inscripciones, solicitud de certificados, legajos, entre tantos otros. De esta forma, va a hacer que en la escuela nos centremos en lo que realmente importa: el aprendizaje real y significativo de nuestros chicos y chicas. Es una propuesta que hace ahorrar mucho dinero y, a su vez, pone al alcance de cada vecino (de todas las edades) la posibilidad de estudiar.
También tenemos el proyecto de la creación del Primer Observatorio de Calidad Educativa, lo que permitirá conocer la realidad de cada institución y así desarrollar políticas públicas situadas que den respuesta y permitan ser herramientas de mejora y transformación en cada escuela.
Y, siendo que marzo es considerado el mes de la mujer, no quisiera dejar de mencionar la importancia de las políticas públicas específicas para las mujeres, para que puedan acceder a capacitaciones, carreras, con horarios flexibles que les permitan formarse, aunque tengan familia, ya que sabemos que cuando una mujer tiene hijos, sus horarios se limitan.
Y si bien los programas curriculares dependen del gobierno provincial, desde el municipio es posible ofrecer complementos educativos para todos los niveles, como inglés desde primer grado, la práctica de deportes y el desarrollo de la cultura, no solo para un grupo de niños, sino que sea extendido a todo el partido.
La educación es todo, y lo vemos tristemente en las noticias a diario. Vemos sociedades que educan en la violencia, y esto se traduce en horror y guerras, o podemos educar desde la paz, la construcción social, el conocimiento, el cuidado y respeto del cuerpo y la salud, y así mejorar vidas. La movilidad ascendente social es real cuando la educación toma la centralidad en las políticas públicas.
Estoy convencida de que el municipio de Tigre puede ofrecer más y mejor educación con los recursos que ya tiene, sin generar más gastos a los vecinos.